Masala es una mezcla de especias típicas de la cocina hindú.
Chai es la palabra común para el té en muchos países de oriente.
Masala Chai es una bebida a base de té negro con especias, muy típica de la India y países limítrofes. Admite múltiples variantes, y resulta todo un chute de energía sin los efectos secundarios del café.
Las versiones que yo he probado en diferentes teterías suprimen la pimienta y a veces también el jengibre, para quitarle ese puntillo picante (que es precisamente por lo que a mí tanto me gusta) de cara a los profanos.
Hay que darle una oportunidad, no conozco a nadie a quien le haya convencido la primera vez que lo prueba, pero luego engancha sin remedio.
Además hay que tener en cuenta que en esta receta los ingredientes están combinados a mi gusto, lo ideal es ir probando hasta descubrir el punto de especias que más nos gusta, y también si se quiere más o menos té, leche, azúcar, etc.
También admite nuez moscada, hinojo, anís estrellado e incluso una vaina de vainilla. La leche se puede sustituir por leche de soja.
Una vez aclarado esto...
Ingredientes para 2 tazas grandes:
* 600 ml. de agua
* 300 ml. de leche
* 3 clavos
*4 vainas de cardamomo
* 4 granos de pimienta negra
* un trozo de canela en rama
* una rodaja de jengibre fresco
* 1-2 cucharaditas de té negro (ceylan o assam)
* 4 cucharaditas de azúcar moreno
Tostar ligeramente el jengibre y, a continuación, machacar en el mortero con el resto de las especias.
Ponerlas en un cazo con el agua, la leche y el té, y calentar 20 minutos. Añadir el azúcar y colar bien.
Escanciar varias veces de un recipiente a otro para que se forme espuma en la superficie.
Servir caliente.
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